DIOS QUISO CONDENAR LA SODOMIA CON EL CASTIGO DE LA MÁS RIGUROSA VENGANZA: SAN PEDRO DAMIÁN
HOY 23 DE FEBRERO SE CELEBRA LA FIESTA DE UN SANTO INCOMODO, SAN PEDRO DAMIÁN, AUTOR DEL LIBRO: GOMORRIANOS, DONDE DENUNCIA LA INFILTRACIÓN EN EL CLERO DE SU TIEMPO DE LAS CONDUCTAS HOMOSEXUALES. DUDO QUE EN NUESTRA ÉPOCA HUBIERA SIDO ELEVADO A LOS ALTARES.
SAN PEDRO DAMIÁN, AZOTE DE LA
INFILTRACIÓN LGTBI EN LA IGLESIA
"Ha arraigado entre nosotros
cierto vicio sumamente asqueroso y repugnante”, escribía a mediados del S. XI
Pedro Damián en su Liber Gomorrhianus . “Si no se lo extirpa cuanto antes con
mano dura, está claro que la espada de la cólera divina asestará sus golpes, de
un momento a otro, para la perdición de muchos (…).
El pecado contra natura repta como
un cangrejo hasta alcanzar a los sacerdotes. Y, en ocasiones, como una bestia
cruel introducida en el rebaño de Cristo, se desenvuelve con tanta astucia, que
más les valdría, a muchísimos, ser apresados por los guardias que, amparados en
su estado religioso, ser arrojados con tanta facilidad al férreo yugo de la
tiranía del diablo, especialmente cuando media escándalo de tantas personas
(…).Y, a no ser que la Santa Sede intervenga cuanto antes con contundencia,
cuando queramos poner freno a esta lujuria desenfrenada, ya no habrá quien la
detenga”.
Nada nuevo bajo el sol. San Pedro
Damián vivió en una era en la que la Iglesia estaba herida con una plaga
similar a la que sufrimos ahora, pero con la crucial diferencia de que entonces
se puso nombre al problema y se encaró sin subterfugios ni, menos aún,
propuestas para cambiar la doctrina moral inalterable de nuestra fe. El propio
santo proponía medidas concretas para atajar el problema:
Un clérigo o un monje que moleste a
los adolescentes o a los jóvenes, o que haya sido sorprendido besándolos o en
algún otro comportamiento vergonzoso, sea flagelado públicamente y pierda la
tonsura.
Después de dejarlo calvo, sea
cubierto de escupitajos e inmovilizado con cadenas de fierro, sea dejado en la
angustia de la cárcel durante seis meses. Durante el tiempo de vísperas, tres
veces por semana coma pan de cebada.
Luego, por otros seis meses, bajo la
custodia de un padre espiritual, viva segregado en un lugar pequeño, se le
ocupe en labores manuales y oraciones. Sométaselo a ayunos y camine siempre
vigilado por dos hermanos espirituales, sin permitirse hablar de cosas
perversas.
No se le permita frecuentar a
personas más jóvenes que él. Este sodomita valore profundamente si ha
administrado bien sus oficios eclesiásticos, ya que la autoridad sagrada juzga
estos ultrajes tan ignominiosos y vergonzosos.
Tampoco se deje tentar para que no
tenga sexo anal con nadie, ni tampoco entre los muslos, ya que […] será
sometido –y justamente– a todas las angustias provocadas por tal comportamiento
vergonzoso”.
El reciente 18 de
diciembre 2023, “el papa Francisco” con su acostumbrado lenguaje ambiguo(doble,
sin claridad) aboga para que en la iglesia se bendiga la aberración o lo que es
lo mismo, las parejas homosexuales, y emitió
una declaración llamada “Fiducia Supplicans” (“súplica de confianza” en latín),
a través del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, firmada por las máximas
autoridades de dicho dicasterio: el cardenal Víctor Manuel Fernández (más
conocido en su país natal Argentina como “tucho”, y monseñor Armando Matteo.
El “papa Francisco” dice:
No bendigo un matrimonio homosexual, bendigo a dos personas que se aman.
Lo que no pueden hacer es enjuiciarlo, excomulgarlo oficialmente, porque excomulgado igual está y desde hace mucho, solo falta que se haga oficialmente.
VATICANO
DE BERGOGLIO ARRODILLADOS FRENTE A UN INDIO EN ERECCIÓN
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"EXCOMÚLGUESE A CUALQUIERA QUE OSE RECIBIR LA SAGRADA COMUNIÓN EN LA MANO." "NO ME TOQUES" JN 20,17 "NO DEIS LO SANTO A LOS PERROS, NI ECHÉIS VUESTRAS PERLAS DELANTE DE LOS CERDOS, NO SEA QUE LAS HUELLEN CON SUS PATAS, Y VOLVIÉNDOSE OS DESPEDACEN".MT 7,6
SIN
COMUNIÓN NO HAY DIEZMO, NO EXISTE OBISPO SOBRE LA FAZ DE LA TIERRA CON PODER
PARA PROHIBIR RECIBIR LA SAGRADA COMUNIÓN EN LA BOCA.
Bueno eso dice Bergoglio pero veamos
que dice Dios a través del Espíritu Santo en su iglesia, en sus santos, en sus papas,
en su palabra:
Cuando ustedes digan “sí”, que sea
realmente sí; y cuando digan “no”, que sea no. Cualquier otra cosa que digan
más allá de esto proviene del maligno.
Mateo 5, 37
Cardenal Francis Arinze, ex prefecto
de la Congregación para el Culto Divino con Juan Pablo II y Benedicto XVI: "LA IGLESIA NO TIENE EL PODER DE BENDECIR A LAS PAREJAS
HOMOSEXUALES".
“La presión para que las relaciones
homosexuales sean reconocidas como una nueva forma de familia, que también
tienen derecho a adoptar”, es “una violación de la ley de Dios” una “ideología
del mal…que pretende utilizar los derechos humanos contra la humanidad y la
familia”.
- Su Santidad papa Juan Pablo II -
¿Cuáles son los Pecados que claman venganza al Cielo según el Catecismo de San Pío X?
R. Los pecados que se dicen clamar venganza
al cielo son cuatro:
1.°, el homicidio voluntario;
2.°, el pecado impuro contra
el orden de la naturaleza(sodomía);
3.°, la opresión del pobre;
4.°, la defraudación o retención
injusta del jornal, del trabajador.
¿Por qué se dice que estos pecados claman al
cielo?
R. Dícese que estos pecados claman
al cielo porque lo dice el Espíritu Santo, y porque su iniquidad es tan grave y
manifiesta que provoca a Dios a castigarlos can los más severos castigos.
Basado en la
palabra de Dios aquí dice claramente que el pecado contra el orden de la
naturaleza(sodomía) clama venganza al cielo ¿Porqué Bergoglio dice otra cosa? Claramente
está contra Dios, el soberbio se cree más que Dios, el soberbio le dice a Dios
que está equivocado, el soberbio corrige a Dios.
"No erréis, que NI LOS
FORNICARIOS, ni los idólatras, NI LOS ADÚLTEROS, NI LOS AFEMINADOS, NI LOS QUE
SE ECHAN CON VARONES, 10 Ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni
los maldicientes, ni los robadores, heredarán el reino de Dios.
(1Corintios 6, 9-10)
San Juan Crisóstomo.
“Todas las pasiones son deshonrosas,
porque el alma es aún más dañada y degradada por el pecado que el cuerpo es por
la enfermedad. Sin embargo, la peor de todas las pasiones es la lujuria entre
los hombres. […]
por lo tanto, os digo que ellos [los
homosexuales] son incluso peores que asesinos, y que sería mejor morir que
vivir en tal deshonor. Un asesino sólo separa el alma del cuerpo, mientras que
estos [los homosexuales] destruyen el alma dentro del cuerpo. …. No hay nada,
absolutamente nada, más absurdo o perjudicial que esta perversidad “.
Catalina de Siena: "Los pecados de sodomia contra la naturaleza son
pestilentes hasta para los propios demonios" (Revelaciones de Cristo a
Santa Catalina de Siena).
"QUE NADIE OS
ENGAÑE. QUIÉN BENDICE EL PECADO, ES DEL DIABLO".
Quien se revela contra la ley justa de
Dios es del diablo, no de Dios.
P. Artur Migas
7 Hijos míos que nadie os engañe; quien
nombra a la justicia es ajusto, así como Él Dios es justo. 8 quien comete el pecado es del diablo, porque el diablo
peca desde el principio. Para esto se manifestó el Hijo de Dios, para deshacer
las obras del diablo,(para destruir el pecado en nosotros)
1ra. Juan 3
Quien es de Dios no comete pecado,
se convierte, sale del pecado.
Quien comete el pecado, vive en el
pecado y con orgullo lo defiende, lo afirma, este es del diablo, es hijo del diablo,
EN ESTO SE RECONOCEN LOS HIJOS DE DIOS Y LOS HIJOS DEL DIABLO, lo dice San Juan
ápostol.
Sálganos de este error no todo el mundo
se salva, no todo el mundo es hijo de Dios, hijo de Dios es solamente el que no
peca dice Jesús, que quiere vivir santamente, este es hijo de Dios y a este
debemos bendecir, para darle más fuerza para que persista y sea fiel a este
camino de no pecar, de agradar a Dios.
Hay hijos del diablo, pero a estos
Dios no bendice, a estos maldice como a la higuera en el evangelio que se secara
de raíz, porque no había correspondido a las esperanzas del hijo de Dios y lo
mismo las personas maldecidas por Dios, si viven en el pecado, se reafirman en
su pecado, se bendicen su pecado maldiciendo a Dios, en el fondo se burlan de
Dios, de su justicia, de su santidad, de sus leyes, les da igual lo que agrada
a Dios o no, ellos quieren vivir así como quieren y eso Dios no bendice, eso
maldice y ningún magisterio está por encima de la palabra de Dios.
Catecismo de la Iglesia Católica 86,
búsquenlo curas ignorantes, búsquenlo obispos, ni vuestro magisterio ni el de
los papas está por encima de la palabra de Dios, ésta rige la Iglesia, ésta es
fundamento, roca de la Iglesia Apostólica Santa Romana, y si queréis cambiar la
palabra de Dios, Dios os maldecirá hijos del diablo;
hijos del diablo, de la mentira, de la manipulación, destrozas
la verdad, Dios os maldecirá y pronto lo veréis.
Esto es palabra divina, sagrada
escritura y no inventos de fraternidad universal, masones, si quieren vivir en
fraternidad universal con el demonio, que ellos mismos se rijan su vida ahí en
el banquete infernal.
Inspirado por el espíritu Santo Juan
Bautista gritará que lo oirán todos sus discípulos:
“Este es el cordero de Dios QUE QUITA (NO AFIRMA) QUITA EL PECADO DEL MUNDO”, ÉL NO BENDICE LOS PECADOS DE LOS HOMBRES, LOS QUITA.
DIOS QUISO CONDENAR LA SODOMIA CON
EL CASTIGO DE LA MÁS RIGUROSA VENGANZA: SAN PEDRO DAMIÁN
San Pedro Damián, el reformista.
San Pedro Damián es considerado patrono del reformismo en la religión y del estudio.
(Todas las reformas en la Iglesia han sido siempre para volver a la tradición)
A lo largo de la Edad Media, es
decir, en el período de formación de la civilización cristiana occidental, la
Iglesia nunca dejó de promover la virtud de la templanza y de renovar la
condena del vicio antinatural; de esta manera logró reducirlo a un fenómeno muy
raro y marginal.
Entre los santos que lucharon contra
el vicio homosexual en la Edad Media, uno de los más grandes fue San Pier
Damiani, Doctor de la Iglesia, reformador de la orden benedictina y gran
escritor y predicador.
En su Liber Gomorrhianus, escrito
hacia 1051 para el Papa San León IX, denuncia con gran vigor la ruina
espiritual a la que están condenados quienes practican este vicio.
Se está extendiendo en nuestras
regiones un vicio tan gravemente dañino e ignominioso que, si no se le opone lo
antes posible una celosa intervención punitiva, la espada de la ira divina
ciertamente arderá enormemente, destruyendo a muchos. (…)
Esta vileza es considerada con razón
el peor de los crímenes, pues está escrito que Dios todopoderoso siempre la
aborreció de la misma manera, tanto es así que mientras para los demás vicios
puso límites mediante el precepto legal, este vicio quiso condenarlo, con el
castigo de la más rigurosa venganza. De hecho, no se puede ocultar que destruyó
las dos ciudades infames de Sodoma y Gomorra, y todas las zonas vecinas,
lanzando del cielo lluvia de fuego y azufre (…)
Y es muy cierto que quienes, contra
la ley de la naturaleza y contra el orden de la razón humana, entregan su carne
a los demonios para disfrutar de relaciones tan repugnantes, compartan con los
demonios la celda de su oración.
En efecto, como la naturaleza humana
resiste profundamente estos males, aborreciendo la falta del sexo opuesto, es
más claro que la luz del sol que nunca probaría cosas tan perversas y ajenas si
los sodomitas, convertidos en casi vasos de ira destinados para ruina, no
estaban totalmente poseídos por el espíritu de iniquidad; y de hecho este
espíritu, desde el momento en que se apodera de ellos, llena tan gravemente sus
almas con toda su maldad infernal, que anhelan con la boca bien abierta no lo
que les solicita su natural apetito carnal, sino sólo lo que éste les propone.
ellos en su diabólica solicitud.
Por lo tanto, cuando el hombre malo
se precipita en este pecado de impureza con otro varón, no lo hace por el
estímulo natural de la carne, sino sólo por el impulso natural. (…)
Este vicio no debe considerarse en
absoluto un vicio ordinario, porque supera en gravedad a todos los demás
vicios.
De hecho, mata el cuerpo, arruina el
alma, contamina la carne, apaga la luz del intelecto, expulsa al Espíritu Santo
del templo del alma, introduce el demonio instigador de la lujuria, induce al
error, desarraiga la verdad con una mente engañada, prepara trampas al viajero,
lo arroja a un abismo, lo cierra allí para no dejarlo salir más, le abre el
Infierno, le cierra la puerta del Paraíso, lo transforma de ciudadano de la
Jerusalén celestial en el heredero de la Babilonia infernal, de estrella del
cielo a paja destinada al fuego eterno, lo separa de la comunión de la Iglesia
y lo arroja al voraz y hirviente fuego infernal.
Este vicio se esfuerza por socavar
los muros de la Patria celestial y repara el de la Sodoma quemada y revivida.
De hecho, viola la austeridad,
extingue el pudor, esclaviza la castidad, mata la virginidad irrecuperable con
el puñal de un contagio impuro, todo lo contamina, todo lo mancha, todo lo
contamina y, en la medida de lo posible, no permite que sobreviva nada puro,
casto. de un extraño a la inmundicia. (…).
💠💠💠⚜️💠💠💠
SAN PEDRO DAMIÁN, OBISPO, CONFESOR Y DOCTOR DE LA IGLESIA.
Ingresó en la Orden de los Camaldulenses. Nombrado Cardenal-Obispo de Ostia, tuvo que aceptar a contragusto ese nombramiento, bajo pena de excomunión. Dejó más de 158 cartas, 60 opúsculos, varias vidas de santos y admirables sermones.
INTRÉPIDO DEFENSOR DE LA IGLESIA EN
UNA ERA DE GRAVE CRISIS.
Para combatir los males que se
abatieron sobre la Iglesia y la Cristiandad en el siglo XI, la Divina
Providencia suscitó a santos de una envergadura poco frecuente.
San Pedro Damián fue un hombre
austero y rígido que Dios envió a la Iglesia Católica en un tiempo en el que la
relajación de costumbres era muy grande y se necesitaban predicadores que
tuvieran el valor de corregir los vicios con sus palabras y con sus buenos
ejemplos. Nació en Ravena (Italia) el año 1007, en el seno de una familia
extremamente pobre. Fue el último de muchos hermanos. Su madre, desesperada por
los aprietos que pasaba para alimentar a su numerosa prole, lo abandonó en la
vía pública. Fue entonces recogido por una mujer que vivía pecaminosamente con
un sacerdote, siendo más tarde devuelto a la casa paterna.
Quedó huérfano a tierna edad, uno de
sus hermanos se encargó de su subsistencia, pero lo trataba como a un esclavo,
obligándolo a cuidar de los puercos, lo humilló terriblemente y lo trataba como
al más vil de los esclavos.
Otro hermano, llamado Damián, que
era arcipreste de Ravena, lo liberó de esa situación y lo ayudó a iniciar los
estudios. En señal de gratitud, Pedro tomó su nombre y lo unió al suyo, pasando
así a ser conocido como Pedro Damián.
El antiguo cuidador de cerdos
resultó tener una inteligencia privilegiada y obtuvo las mejores calificaciones
en los estudios y a los 25 años ya era profesor de universidad, llegando a
dictar clases en Faenza y Ravena. Sin embargo, como ésta no era su vocación, no
se sentía satisfecho de vivir en un ambiente tan mundano y corrompido, y
dispuso hacerse religioso.
Estaba meditando cómo entrarse a un
convento, cuando recibió la visita de dos monjes benedictinos, de la comunidad
fundada por el austero San Romualdo, y al oírles narrar lo seriamente que en su
convento se vivía la vida religiosa, se fue con ellos.
Ingresó a los 28 años en la Orden
Camaldulense, fundada recientemente por San Romualdo. Entró en el Monasterio de
Fuente Avellana, pronto resultó ser el más exacto cumplidor de los severísimos
reglamentos de su convento, estimulados por el ejemplo de su vida virtuosa, los
monjes lo eligieron Abad, después del fallecimiento del superior de aquella
casa.
En sus años de monje, Pedro Damián
aprovechó aquel ambiente de silencio y soledad para dedicarse a estudiar muy
profundamente la Sagrada Biblia y los escritos de los santos antiguos. Esto le
servirá después enormemente para redactar sus propios libros y sus cartas que
se hicieron famosas por la gran sabiduría con la que fueron compuestas.
Su actuación en este honroso cargo
fue altamente benéfica para la Orden, no sólo por la fundación de varios
monasterios, sino por la reforma de la Orden de los Monjes de la Santa Cruz.
Varios discípulos suyos alcanzaron la santidad, como San Rodolfo, San Juan de
Lodi y Santo Domingo Loricato.
Imbuido de una caridad verdadera,
Pedro Damián no se contentó con vivir tranquilamente en su monasterio, mientras
numerosas almas se perdían en el mundo. Juzgó su deber atacar con vigor los
errores y vicios de la época, especialmente los diseminados en los ambientes
eclesiásticos.
La inmoralidad de los clérigos,
blanco del santo reformador
San Pedro Damián percibió con
claridad que la inmoralidad reinante entre los sacerdotes era el primer enemigo
a ser debelado, dado que ésa era la fuente de otros pecados –avaricia, envidia,
soberbia– que devastaban al Clero en aquel entonces.
Juzgando insuficiente la prédica
contra esos males, escribió en 1051 una obra que hasta hoy suscita polémicas:
El libro de Gomorra. En él, empleando un lenguaje fuerte, vitupera todo tipo de
pecados contra la castidad, fustigando a aquellos que deberían impedir ese
estado de cosas y no lo hacían.
El Papa reinante, San León IX,
acogió el libro con significativas palabras de elogio. Pero, naturalmente, los
aludidos por tal ataque quedaron indignadísimos. Y consiguieron el apoyo de
numerosos sacerdotes que, a pesar de deplorar la inmoralidad vigente, juzgaban
que no era oportuno revelar de forma tan clara esa situación.
El clamor producido fue tal que el
Santo Padre quedó un tanto desconcertado. San Pedro Damián, sin embargo, no se
dejó abatir y escribió al Papa una carta en la cual, al par de la reverencia y
sumisión debidas al Sumo Pontífice, justificaba su posición y la necesidad de
semejante obra en aquellas circunstancias muy especiales. Con ello, la tormenta
amainó un tanto, pero aún continuó viva por algunos años.
Esta lucha contra la inmoralidad en
el Clero duró toda su vida, valiéndole numerosos enemigos, los cuales no
sentían el menor escrúpulo en lanzar contra él las más variadas calumnias.
ELIMINACIÓN DE LA SIMONÍA: DECISIVA
VICTORIA DEL SANTO
Otro campo de batalla se abrió para
San Pedro Damián, cuyo celo por la causa de la Iglesia era inagotable: la lucha
contra la venta de cargos eclesiásticos, conocida como simonía.
1 El comprensible afán de cohibir
tal abuso llevó a recurrir a algunas doctrinas erradas, y hasta absurdas. Una
de ellas afirmaba que si un obispo hubiese comprado el cargo, perdía el poder
de conferir el sacerdocio. Ahora bien, si las ordenaciones sacerdotales por él
conferidas no eran válidas, los sacramentos administrados por esos padres
tampoco lo eran. Es obvio que la aplicación de tal doctrina provocaría de
inmediato un gran desorden.
De hecho, comenzó a establecerse una
confusión generalizada, en medio de la cual obispos reordenaban a sacerdotes
como medida de seguridad. Tres Concilios fueron convocados, sin conseguir
solucionar el problema en sus justos límites.
Para cerrar el paso a tamaños
absurdos, San Pedro Damián redactó una obra titulada Gratissimo, en la cual
defiende la verdadera doctrina católica sobre la materia, demostrando la tesis
de que el Sacramento del Orden conferido por un obispo, a pesar de que pueda
ser simoniaco, es válido. El autor ilustra su tesis al presentar ejemplos de
santos sacerdotes, ordenados por obispos simoníacos.
Normalmente la refutación de
doctrinas erróneas sigue un largo proceso que suscita polémicas. La mencionada
obra de San Pedro Damián, no obstante, de tal manera esclarecía la cuestión,
que su simple lectura era suficiente para sofocar las controversias.
Así, en poco tiempo los obispos —y
el propio Papa San León IX— tomaron posición a respecto del tema, siendo la
simonía condenada en un Concilio efectuado en Roma en el año de 1049.
CONTRA SU VOLUNTAD, ES NOMBRADO
CARDENAL Y OBISPO DE OSTIA
Después de aquellas luchas en
defensa de la Iglesia, San Pedro Damián deseaba retirarse para llevar una vida
solitaria, propia a su vocación de camaldulense.
La historia de este santo, sin
embargo, es un caso característico del trato que Dios reserva a muchos de los
que más ama: despierta en el alma el deseo de un tipo de vida y obliga a seguir
otro. A ejemplo de San Bernardo, este gran contemplativo fue compelido a una
vida activa, repleta de viajes y polémicas, opuesta a la soledad y al silencio
de un claustro.
Después de la muerte de San León IX,
fue electo un nuevo Papa que murió al poco tiempo. Su sucesor, Esteban IX,
manifestó su deseo de concederle el capelo cardenalicio al infatigable Abad de
Fuente Avellana, como recompensa por los grandes servicios prestados a la
Iglesia. Y lo nombró asimismo obispo de Ostia.
San Pedro Damián, sin embargo,
rehusaba el ofrecimiento con tal vigor, que fue necesario amenazarlo con la
excomunión si persistía en la negativa.
Después de su consagración episcopal
y elevación al cardenalato, no dejó de pedir en repetidas ocasiones la dimisión
de aquella dignidad, pues la consideraba un obstáculo para su unión con Dios.
Llegó al punto, años después de la muerte de Esteban IX, de llamarlo
“perseguidor”, por haberle impuesto el episcopado.
DELICADAS E IMPORTANTES MISIONES
Conocedores de su virtud, los Papas
lo encargaron de ejecutar diversas misiones complicadas, que le exigieron
frecuentes viajes.
La primera de ellas fue la reforma
del clero de la diócesis de Milán, donde la simonía se había generalizado, y
gran número de sacerdotes vivía en concubinato.
Anteriores intentos, liderados por San Arialdo —que fue martirizado por esa causa— sirvió para que la intervención de San Pedro Damián, fuera decisiva. El propio Prelado de Milán escribió una Carta Pastoral condenando los vicios de la simonía y la impureza reinantes en su clero. En una ceremonia conmovedora, todos los clérigos de la diócesis juraron abandonar ambos vicios y aceptaron las penitencias que les fueron impuestas.
Apenas concluida tal misión, el
santo participó activamente en la lucha a favor del nuevo Papa Alejandro II
contra el antipapa que había surgido en Alemania. A ese respecto escribió un
libro titulado Disputa Sinodal, en el cual expone los principios por los cuales
un Papa, para subir al Solio Pontificio, no necesita de la aprobación del
Emperador del Sacro Imperio Romano Alemán.
Últimas cruces y muerte, antes de
volver a la ansiada contemplación
Más allá de los numerosos viajes que
tuvo que emprender, no le faltaron a San Pedro Damián las más diferentes
cruces.
Él mismo llegó a ser acusado de
simoniaco por el pueblo de Florencia, pues habiendo sido llamado a juzgar una
causa entre el obispado y unos monjes locales, constató que la justicia estaba
del lado del Prelado. Al pueblo, empero, no le gustó esa decisión...
Lo acusaron también de credulidad
excesiva, pues para probar sus tesis se valía con frecuencia de hechos
sobrenaturales.
Además, es necesario resaltar que
durante toda su vida tuvo que soportar una salud frágil, sufriendo
especialmente de insomnio y dolores de cabeza, motivo por el cual es invocado
contra tales padecimientos.
San Gregorio VII, el gran Papa
reformador, se valió de este santo para la realización de delicadas misiones
Con el fin del cisma provocado por
la elección del antipapa Honorio II, tan atacado por él, le pareció al santo
llegada la hora de retirarse a su monasterio.
Fue entonces cuando surgió el caso
del Emperador Enrique IV, que deseaba divorciarse de su legítima esposa,
habiendo para ello convocado una asamblea en Frankfurt. El mal ejemplo de un
Emperador podría diseminar tal pecado por toda la Cristiandad.
El Papa Alejandro II, por medio del
Archidiácono Hildebrando —el futuro Papa San Gregorio VII— envió a nuestro
santo a Alemania para resolver el problema. ¿Qué podría hacer un Cardenal
contra el hombre más poderoso de su época en la esfera temporal? Pero San Pedro
Damián contaba con los auxilios sobrenaturales, más que con sus propias fuerzas
o influencia. Por ello consiguió impedir que el Emperador consumara el
escándalo. Sin ningún temor o respeto humano, amenazó con excomulgarlo en
aquella misma asamblea y delante de sus súbditos. El Emperador, a pesar de ser
muy soberbio y no querer doblegar la cabeza, comprendió que era imposible
enfrentar al santo, optando por reconciliarse con su mujer.
Después de esa misión victoriosa,
aún le encargaron otra, que sería la última de su vida: la reconciliación de su
ciudad natal, Ravena, con el Papa.
El arzobispo de esa ciudad había
sido excomulgado, muriendo sin ser absuelto. Lo cual llevó al pueblo a una
actitud de rebeldía contra Roma. Le fue necesario al santo emplear toda su
caridad e inteligencia para tranquilizar los ánimos y restablecer la paz.
Una vez obtenida, estaba San Pedro
Damián en camino de Faenza, cuando la muerte lo sorprendió a los 65 años, en el
Monasterio de Santa María de los Ángeles, donde fue enterrado. Era el día 22 de
febrero de 1072.
Su cuerpo fue trasladado varias
veces de sepultura, en el año 1595 —cinco siglos después—
permanecía incorrupto.
León XII, en 1828, le concedió el
título de Doctor de la Iglesia.
EL LIBRO DE LOS GOMORRIANOS
(En latín: LIBER GOMORRHIANUS)
El Libro de Gomorra es una obra escrita y publicada por el Cardenal Pedro Damián alrededor de 1051.Este tratado es una feroz crítica a los vicios del clero de la época, dirigido al papa León IX.
LIBRO DE GOMORRA
San Pedro Damián y su lucha contra la corrupción en la Iglesia
del siglo XI a través de su libro, el cual denunciaba la grave depravación
moral del clero de la época. El libro clasificaba la sodomía en cuatro grados y
pedía penitencias más severas para los clérigos culpables. A pesar de la
oposición de algunos dirigentes de la Iglesia,
💠💠💠⚜️💠💠💠
San Pedro Damián, el reformista.
San Pedro Damián es considerado patrono del reformismo en la
religión y del estudio.
(Todas
las reformas en la Iglesia han sido siempre para volver a la tradición)
San Pedro Damiani fue un cardenal benedictino, filósofo y
precursor de la reforma gregoriana.
Nacimiento: 1007, Rávena, Italia
Fallecimiento: 22 de febrero de 1072, Faenza, Italia
Nombre: Piero Damiani
Atributos de su imagen: Atuendo de cardenal y portando un libro
PEDRO DAMIÁN, SANTO
Cardenal y doctor de la Iglesia
Martirologio Romano
Memoria Litúrgica, 23 de febrero
(novus ordo 21 de
febrero)
OBISPO DE OSTIA Y DOCTOR DE LA
IGLESIA.
Falleció el día veintidós de febrero en Favencia, de la Romagna
(1072).
Fecha de canonización: En el año 1828 por el Papa León XII.
San Pedro Damián, inicialmente vivió como monje benedictino, más
tarde aceptó ser ordenado obispo y luego fue creado cardenal. Su contribución
más importante es la renovación eclesial del siglo XI, que tuvo en la reforma
gregoriana su momento cumbre.
San Pedro Damián fue un hombre de profunda oración y
recogimiento, lo que le sirvió para distinguir aquellas cosas que son
esenciales para alcanzar la perfección de la caridad de aquellas que no lo son.
Así, el impulso reformista lo caracterizó a lo largo de su vida, que brotaba
del auténtico trato asiduo con Dios y con su propio interior.
💠💠💠⚜️💠💠💠
En el siglo X, tras la caída del Imperio Romano, la llegada a
Europa de los pueblos bárbaros, y la conversión masiva y superficial de estos
pueblos, la Iglesia se encontró a sí misma formada por una inmensa multitud de
hombres bautizados que mantenían las costumbres depravadas con que habían
vivido lejos de la Fe.
El «retroceso moral» dentro del rebaño de Cristo fue terrible;
ahora el enemigo estaba dentro, y, además, estaba bautizado. Pero no estaba, ni
mucho menos, convertido.
Entre los clérigos se empezó a hablar de pecados nuevos, como la
simonía o el nicolaitismo, desconocidos hasta entonces o restringidos a
personas particularmente perversas, que se hicieron, de la noche a la mañana,
moneda común entre varones ordenados.
Accedieron a las sagradas órdenes hombres incapaces de controlar
su sexualidad, y esclavizados por prácticas depravadas y bestiales.
El «Liber Gomorrhianus», (El libro de los gomorrianos) de san
Pedro Damián, es la denuncia más sincera y triste de cómo la moralidad, entre
los clérigos, se desmoronaba, alcanzando límites insospechados hasta entonces.
Pero, a diferencia de las respuestas violentas que habían surgido entre algunos fieles.
CARDENAL
MÜLLER IMPRESIONES ACERCA DEL SÍNODO
La
asamblea era “muy controlada” y bastante manipulada, con la mayoría de las
intervenciones provenientes de solo unas pocas personas.
Nos
dijeron que no debíamos hacer controversias, que hablar [fuertemente] contra
cualquier cosa no es posible o uno es estigmatizado como enemigo del Espíritu
Santo.
¿Cómo
saben que este es el Espíritu Santo?
No
hablan del Espíritu Santo, solo de “el Espíritu,”
Algunos
oradores también hablan de apertura y definen lo que es la tradición,
[diciendo] que "no es estática; es dinámica". Pero al final, todas
estas llamadas reflexiones sinodales tienen como objetivo prepararnos para
aceptar la homosexualidad.
Solo
esto: de lo que no se habló fue de Jesucristo [o] la Revelación divina, la
gracia de las personas humanas creadas de acuerdo con la imagen y semejanza de
Dios, y de Dios como el objetivo de nuestra existencia humana. Todo está dando
la vuelta para que ahora debemos estar abiertos a la homosexualidad y a la
ordenación de las mujeres. Si lo analizas, todo se trata de convertirnos a
estos dos temas.
Dicen:
"Tenemos nuestras nuevas ideas, reveladas por el Espíritu Santo", por
lo que a partir de ahora los actos homosexuales o la bendición de los actos
homosexuales son algo bueno. Esa es su idea. Es abusar del Espíritu Santo para
introducir doctrinas que están abiertamente en contra de las Sagradas
Escrituras.
Un
obispo alemán que asistió al sínodo dijo a los periodistas durante el sínodo
que es importante poner a Cristo en el centro, pero al mismo tiempo,
"necesitamos dejar de lado la Tradición apostólica". ¿Qué quiso decir
con esto?
Este
es un truco que están haciendo. No están presentando directamente estas ideas,
sino que están enviando a estas personas como este obispo a decir estas cosas,
y luego están diciendo que es solo su opinión personal. Pero en realidad, están
desarrollando un entendimiento que no es coherente con la fe católica.
Un
destacado obispo alemán en el Camino Sinodal Alemán le dijo a este sínodo que
todos los temas que plantearon en Alemania deberían convertirse en el ejemplo
de Alemania para el mundo. Pero en los últimos años, la Iglesia en Alemania ha
perdido un tercio de [sus] miembros, tiene pocas vocaciones y la asistencia a
la misa dominical se ha derrumbado.
LA
SANTA IGLESIA CATÓLICA ATIENDE EL 25% DE ENFERMOS DE VIH
"Los
gobiernos y políticos que hoy promueven estas agendas en la sociedad, que
hablan mucho de los homosexuales, algunos incluso dicen representarlos. Pero a
pesar de ello, son el sector social al que más desprecian y el que en realidad
menos les importa. La realidad es que, en la mayoría de los casos, los
homosexuales les importan un comino. Son utilizados como un contrapeso para
acceder al poder.
¿Han
visto alguna vez a estos políticos en algún albergue cuidando, ayudando etc.. a
los enfermos de sida?"
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