La Bendición papal Orbi Et Orbi
Los efectos de la bendición Urbi et orbi se cumplen
para toda aquella persona que la reciba con fe y devoción, incluso si la recibe
a través de los medios de comunicación de masas (televisión, radio, internet,
etc.).
La bendición Urbi et orbi se imparte durante el
año siempre en dos fechas:
El Domingo de
Pascua (domingo de Resurrección) y el día de Navidad,
25 de diciembre
PERO PUEDE SER RECIBIDA EN CUALQUIER FEHA
O ÉPOCA DEL AÑO
Y COMO
TODA BENDICIÓN SE RECOMIENDA RECIBIRLA DE RODILLAS.
La característica fundamental de esta bendición
para los fieles católicos es que otorga la remisión por las penas debidas por
pecados ya perdonados, es decir, confiere una indulgencia plenaria bajo las
condiciones determinadas por el Derecho Canónico (haber confesado y comulgado,
y no haber caído en pecado mortal).
La confesión y la comunión cuando no es posible hacerlas el mismo día pueden ser hechas días antes o días después.
La confesión y la comunión cuando no es posible hacerlas el mismo día pueden ser hechas días antes o días después.
S.S PIO XII
Desde un principio cuando Dios creó al hombre, fue con el propósito
de prepararlo y hacerlo apto para vivir en el cielo, por eso todas las cosas en
la tierra fueron establecidas en orden al
cielo., La iglesia, la educación, las leyes, etc.,
Para comparar las penas debidas por el pecado, aquí un
ejemplo.,
Si una persona por manejar en estado indebido o por ingerir drogas o alguna otra razón, le quita la vida a un padre de familia, con hijos menores que dependen completamente de él (este sería el pecado), cuando el homicida es detenido y luego recibe sentencia a una cantidad de años en la cárcel (esto es la pena) y debe pagar también a la familia una indemnización o pasarle una cantidad mensual para que los hijos puedan recibir una educación (esto sería la reparación del daño).
La pena de muerte sería por ejemplo una pequeña muestra del infierno, que nos demuestra que no todos pueden ser perdonados y salvos, y que cuando hay peligro de herejía culpable o cisma se debe privar de la vida al hereje.
Debería estar instituida en cada país del mundo, sin embargo debido a la mucha corrupción en los países pobres y subdesarrollados sería utilizada para fines personales.
Si una persona por manejar en estado indebido o por ingerir drogas o alguna otra razón, le quita la vida a un padre de familia, con hijos menores que dependen completamente de él (este sería el pecado), cuando el homicida es detenido y luego recibe sentencia a una cantidad de años en la cárcel (esto es la pena) y debe pagar también a la familia una indemnización o pasarle una cantidad mensual para que los hijos puedan recibir una educación (esto sería la reparación del daño).
La pena de muerte sería por ejemplo una pequeña muestra del infierno, que nos demuestra que no todos pueden ser perdonados y salvos, y que cuando hay peligro de herejía culpable o cisma se debe privar de la vida al hereje.
Debería estar instituida en cada país del mundo, sin embargo debido a la mucha corrupción en los países pobres y subdesarrollados sería utilizada para fines personales.
Otro ejemplo sería:
Si una persona roba y luego se arrepiente y se confiesa, lo
correcto es que el confesor no lo absuelva hasta haber restituido lo que se
haya robado y si por alguna razón ya no se le puede restituir a la persona
afectada, se le debe pagar con oraciones u obras de misericordia, o restituir
el mismo valor a alguna persona necesitada y ofrecerlo en reparación de ese
pecado.
21Jesús entonces les dijo otra vez: Paz a vosotros; como
el Padre me ha enviado, así también yo os envío. 22Después de decir esto, sopló
sobre ellos y les dijo: Recibid el Espíritu Santo. 23A quienes perdonéis los
pecados, éstos les son perdonados; a quienes retengáis los pecados, éstos les son retenidos. Juan 20:22 Este párrafo quiere
decir que no todos los pecados se deben perdonar O sin haberlos reparado antes.
S.S PIO X
Estas tres cosas debemos reparar:
1.- Pecado: Este se borra con la confesión
2.- Pena del pecado: Esta se borra con la penitencia
3.- Efectos del Pecado: Esta se borra con la reparación del pecado ya sea con las
restitución o con obras espirituales(oración) o de misericordia (ayudas, Diezmos,
limosnas, Servicios, etc.)
Es por esto que son tan importantes las Indulgencias Plenarias,
porque perdonan la pena del pecado y los efectos del pecado, y con la previa
confesión que es el perdón del pecado, quedan borrados completamente los
pecados.
Pero todo esto debe ser hecho con verdadero arrepentimiento y
verdadero propósito de enmienda para no volver a cometer los mismos pecados,
que con la comunión y la confesión frecuentes Dios da la fuerza necesaria para
dejar el pecado.
Debemos aprovechar las gracias que nuestro Señor nos concede en su Santa Iglesia, como las Indulgencias plenarias., ya que mientras estamos vivos podemos reparar fácilmente el pecado en nuestro cuerpo, porque cuando morimos ya no tenemos cuerpo para poder reparar el pecado, sino que tenemos espíritu y el Espíritu se purifica con fuego.
INDULGENCIA
PLENARIA
Urbi et orbi, palabras que en latín significan
"a la ciudad [Roma] y al mundo". Eran la fórmula habitual con la que
empezaban las proclamas del Imperio Romano.
En la actualidad es la bendición más solemne que imparte el Papa, y sólo él, dirigida a la ciudad de Roma y al mundo entero.
En la actualidad es la bendición más solemne que imparte el Papa, y sólo él, dirigida a la ciudad de Roma y al mundo entero.
La bendición Urbi et orbi se imparte durante el
año siempre en dos fechas:
El Domingo de
Pascua (domingo de Resurrección) y el día de Navidad,
25 de
diciembre.
Se hace desde el balcón central de la Basílica
de San Pedro, llamado por eso Balcón de las bendiciones, adornado con cortinas
y colgantes, y con el trono del Papa colocado allí, y para ella el Papa suele
revestirse con ornamentos solemnes (mitra, báculo, estola y capa pluvial) y va
precedido de cruz procesional y acompañado de cardenales-diáconos y
ceremonieros.
También es impartida por el Papa el día de su elección; es decir, al final del cónclave, en el momento en que se presenta ante Roma y el mundo como nuevo sucesor de San Pedro.
También es impartida por el Papa el día de su elección; es decir, al final del cónclave, en el momento en que se presenta ante Roma y el mundo como nuevo sucesor de San Pedro.
La característica fundamental de esta bendición
para los fieles católicos es que otorga la remisión por las penas debidas por
pecados ya perdonados, es decir, confiere una indulgencia plenaria bajo las
condiciones determinadas por el Derecho Canónico (haber confesado y comulgado,
y no haber caído en pecado mortal).
La culpa por el pecado es remitida por el Sacramento de la Reconciliación (confesión), de manera que la persona vuelve a estar en gracia de Dios, por lo cual se salvará si no vuelve a caer en pecado mortal; empero, la pena debida por esos mismos pecados debe ser satisfecha, es decir, se debe reparar y compensar el desorden introducido por el pecado, lo cual se lleva a efecto por medio de la penitencia impuesta en el sacramento, por medio de otras obras buenas y, en último caso, por medio del sufrimiento del Purgatorio.
Dado que la indulgencia plenaria remite completamente esa pena debida, el fallecido sin haber caído nuevamente en pecado no ha de pasar por el purgatorio y accede directamente al cielo.
La culpa por el pecado es remitida por el Sacramento de la Reconciliación (confesión), de manera que la persona vuelve a estar en gracia de Dios, por lo cual se salvará si no vuelve a caer en pecado mortal; empero, la pena debida por esos mismos pecados debe ser satisfecha, es decir, se debe reparar y compensar el desorden introducido por el pecado, lo cual se lleva a efecto por medio de la penitencia impuesta en el sacramento, por medio de otras obras buenas y, en último caso, por medio del sufrimiento del Purgatorio.
Dado que la indulgencia plenaria remite completamente esa pena debida, el fallecido sin haber caído nuevamente en pecado no ha de pasar por el purgatorio y accede directamente al cielo.
Fórmula de
la bendición papal Urbi et orbi
- Sancti Apostoli Petrus et Paulus, de quórum
potestate et auctoritate confidimus, ipsi intercedam pro nobis ad Dominum.
– Amen.
– Precibus et meritis beatæ Mariae semper
Virginis, beati Michaelis Archangeli, beati Ioannis Baptistæ et sanctorum
Apostolorum Petri et Pauli et omnium Sanctorum misereatur vestri omnipotens
Deus et dimissis omnibus peccatis vestris, perducat vos Iesus Christus ad vitam
æternam.
– Amen.
–
Indulgentiam, absolutionem et remissionem omnium peccatorum vestrorum, spatium
verae et fructuosae penitentiæ, cor semper penitens et emendationem vitae,
gratiam et consultationem sancti Spiritus et finalem perseverantiam in bonis
operibus, tribuat vobis omnipotens et misericors Dominus.
– Amen.
– Et benedictio Dei omnipotentis (Patris et
Filii et Spiritus sancti) descendat super vos et maneat semper.
– Amen.
Traducción
en español
La traducción en español aproximada es como
sigue:
"Los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, de
cuyo poder y autoridad estamos seguros, pueden interceder para nosotros al
Señor."
Todos: "Amén"
"Por a las oraciones de siempre Virgen
María bendecida, bendecido Miguel el Arcángel, bendecido Juan el Bautista, y
los apóstoles santos Pedro y Pablo, y todos los santos: puede Dios todopoderoso
tener piedad por Usted, perdonarle sus pecados, y Jesús Cristo le puede traer a
vida siempre duradera."
Todos: "Amén"
"El señor omnipotente y caritativo os
concede legado, distribución y perdón de todos Vuestros Pecados, un período de
arrepentimiento auténtico y fértil, un corazón siempre penitente y mejora de la
vida, la piedad y consuelo del Espíritu Santo, y la perseverancia final en
buenas obras."
Todos: "Amén"
"Y la bendición del Dios omnipotente, del
Padre y del Hijo y del Espíritu Santo viene en vosotros y permanece en casa en
caso de vosotros siempre."
Todos: "Amén"
No hay comentarios:
Publicar un comentario