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viernes, 19 de junio de 2015

LAUDATO SI: EL VÓMITO DE BERGOGLIO EN LA IGLESIA«…APARTARÁN LOS OÍDOS DE LA VERDAD PARA VOLVERLOS A LAS FÁBULAS» (2 TIM 4, 4).


«Laudato si’, mi’ Signore» –
«Alabado seas, mi Señor»,
Canto de san Francisco de Asís.


Esta encíclica si es del papa? Francisco., sin lugar a dudas porque la anterior Lumen Fidei, que escribía el papa Benedicto XVI y donde Bergoglio se tomo el atrevimiento de terminarla y luego proclamar que él la había escrito con Benedicto XVI, volviéndola una falsa encíclica y Haciendo quedar mal al papa Benedicto ya que la lleno de herejías como esta Gravísima herejía: la Eucaristía es una transformación, no una transubstanciación.

Cuando todos los Papas han escritos sus encíclicas y bien pero al papa Benedicto esto no le fue permitido;  Pero esta  LAUDATO SI’ si es obra de Bergoglio, y por sus obras los conoceréis.


CARTA ENCÍCLICA LAUDATO SI’

SOBRE EL CUIDADO DE LA CASA COMÚN

El periodista italiano Antonio Socci ha criticado fuertemente la encíclica del clima de Francisco donde Francisco se preocupa por la supervivencia - cito - "de algas, gusanos, pequeños insectos y reptiles," especies, que "por lo general pasan desapercibidas". Socci Comentó : “Tomemos a Asia Bibi, la pobre madre paquistaní por seis años encerrada en una celda oscura sucia con una sentencia de muerte sobre sus hombros sólo porque ella es cristiana. El Papa Bergoglio nunca quiso hacer una declaración por ella con el fin de pedir que fuera puesta en libertad o incluso invocar oraciones a su favor.”




Mensajes De Dios Al Mundo Presenta La Guía Espiritual Del Padre: josephmaryam A través de los mensajes en sus publicaciones
y en sus repuestas a las preguntas
De feligreses y comentaristas
De la web.








Laudato Si

Padre: Joseph Mariam: No pierdan el tiempo con esta basura, con este vómito de Bergoglio. No dice nada nuevo. Repite lo mismo que lleva hablando estos dos años. Sólo que en este vómito se ve más claro su herejía, su cisma y su apostasía de la fe.
Su vómito ecológico le va a llevar a abandonar esa Silla, porque ha dado un escrito sin inteligencia, que no sigue el método científico y que destruye toda la moral católica.

A los hombres les encantan estas fabulas. Y se cumple el Evangelio:

«…apartarán los oídos de la verdad para volverlos a las fábulas» (2 Tim 4, 4).


Laudato Si: El vómito de Bergoglio en la Iglesia


Padre: Joseph Mariam

La ecología no es una teología, sino un discurso de la mente humana para engañar con palabras bonitas a los hombres. Es un bulo muy bien presentado para que prevalezca una ideología política que aune a todos en la formación de un gobierno mundial para la total destrucción de toda la humanidad.

El fin de la ecología sólo es esto: destruirlo todo porque, en estas condiciones de vida, no hay solución a nada., escondiendo el verdadero propósito. Es la imposición de una idea común, global, universal.

Hay que presentar al mundo un hombre que sea capaz de reunir todo lo creado en su ser para que así el hombre vea que la ecología es el fin del universo: el culto al universo. Todo va evolucionando hacia el Anticristo

Luego, Jesús, que no se encarna en María, sino que se forma en María, como si María necesitara de un hombre para engendrar a Jesús, viene para poner dentro de lo creado lo que su Padre no puso: un germen de transformación que lleve a todo lo creado, que sigue en evolución, hacia la gloria, hacia su elevación. Estos son los delirios de este hombre.


el Anticristo está en el fondo de todo este escrito.






Laudato Si: El vómito de Bergoglio en la Iglesia



DEFINICIÓN DE PANTEÍSMO
El panteísmo es el sistema de creencia de quienes sostienen que la totalidad del universo es el único Dios. Esta cosmovisión y doctrina filosófica afirma que el universo entero, la naturaleza y Dios son lo mismo. En otras palabras, la existencia (todo lo que fue, es y será) puede ser representada a través de la noción teológica de Dios.

El panteísmo es la posición de que Dios y la naturaleza son la misma cosa. La palabra “panteísmo” viene de dos palabras Griegas "pan" que significa "todo" y "theos" que significa "dios". Por lo tanto, este enseña que todas las estrellas, las galaxias, los planetas, las montañas, el viento, la lluvia, son todas una y lo mismo…parte de lo que Dios es. Por lo tanto, el panteísmo declara que todo es Dios.
El Cristianismo Bíblico enseña que Dios está separado de Su creación y que Él la creo (Gn 1:1-30), mientras que el panteísmo declara que Dios y la creación comparten la misma naturaleza y esencia.


Un gran problema con el panteísmo es que este no puede dar cuenta de la existencia del universo. El universo tuvo un principio; éste, no es infinitamente viejo. Esto significaría que Dios también tuvo un principio. Pero, ¿cómo podría algo o alguien traerse a sí mismo a existencia? Esto es imposible, por lo tanto, esto nos deja la pregunta de dónde vinieron Dios y el universo. El panteísmo no puede responder esta pregunta y esto conduce, naturalmente, a lo absurdo.




Laudato Si: El vómito de Bergoglio en la Iglesia


Padre: Joseph Mariam

(Los extractos de la encíclica laudato si’están en color morado).

«El Padre es la fuente última de todo, fundamento amoroso y comunicativo de cuanto existe. El Hijo… se unió a esta tierra cuando se formó en el seno de María. El Espíritu…. está íntimamente presente en el corazón del universo…» (LS – n. 238).

Toda esta basura ecológica se centra en una herejía: el panenteísmo. Es decir, todo está en Dios.

Es algo más que un panteísmo. Es querer imponer la vida humana relacionada entre sí por medio de la naturaleza. El hombre ama a Dios, no directamente, sino a través de la naturaleza. El hombre ama a sus semejantes no con un amor directo, sino con el medio de la naturaleza. El hombre se ama a sí mismo porque antes ama su naturaleza. Se ama a través de otra naturaleza, no en la misma naturaleza. Toda naturaleza es parte de todo el Universo.

Este panenteísmo es el amor en todo. Todo está envuelto del amor de Dios. Todo se recubre de este amor.

Para estas personas el amor de Dios no es un ser espiritual, sino sólo material. El amor de Dios no se concibe como una Voluntad de Dios, sino como una experiencia natural, que integra a todas las criaturas.

El fundamento de todo cuanto existe es la nada: Dios ha creado todo de la nada. Dios no ha creado las cosas de sí mismo.

«La creación es del orden del amor. El amor de Dios es el móvil fundamental de todo lo creado» (LS – n. 77).

La creación es un acto de la Voluntad de Dios, que pone en lo creado un fin último: dar gloria a Dios.

Ese acto de la Voluntad de Dios es distinto al Amor en Dios, al Amor en la Santísima Trinidad.

Dios no tiene necesidad de crear nada porque se ama a sí mismo, se basta a sí mismo. Luego, la creación no es del orden del amor. Es del orden de la Voluntad Divina.

Dios crea algo porque quiere, no porque ama. Lo crea en el Amor, es decir, lo crea en el Espíritu Divino.

 Pero el móvil de todo lo creado, el motor de la creación no es la Voluntad de Dios, no es el amor de Dios, sino lo que rige a ese ser creado: las leyes de la propia naturaleza creada.

La Creación no se mueve por el amor de Dios, sino por sus leyes naturales, que Dios ha escrito en ella.

Estas personas no distinguen entre Creador y criatura. Todo es uno. En el fondo, caen en un panteísmo. Pero van más allá de ese panteísmo.

Al poner el fundamento de todo lo creado en el amor de Dios, entonces viene el sentimentalismo, que es siempre propio de este hombre ciego por su soberbia y por su orgullo:

«… cada criatura es objeto de la ternura del Padre, que le da un lugar en el mundo. Hasta la vida efímera del ser más insignificante es objeto de su amor y, en esos pocos segundos de existencia, él lo rodea con su cariño» (LS – n. 77).

Dios rige a cada criatura con las leyes que ha puesto en cada una de ellas. El reino vegetal tiene unas leyes distintas al mundo animal y a las criaturas humanas.

Dios no llora por ninguna criatura: Dios no rodea con cariñitos a las criaturas. Dios no es un sentimental de lo que ha creado. Sabe muy bien lo que ha creado y sabe gobernar lo creado sin mirar, sin estar pendiente de lo creado.

Pero, para estos personajes, el fundamento de todo lo creado, no es la nada, sino Dios mismo.

El hombre es polvo y vuelve al polvo: el fundamento del hombre es ser polvo, su nada, su miseria existencial. No es el amor de Dios.

Pero, como el fundamento de todo lo creado es el Padre, el amor de Dios, entonces el hombre es parte del mundo:

«Un retorno a la naturaleza no puede ser a costa de la libertad y la responsabilidad del ser humano, que es parte del mundo con el deber de cultivar sus propias capacidades para protegerlo y desarrollar sus potencialidades» (LS – n. 78).

Estos personajes meten al hombre dentro de la naturaleza: «el hombre es parte del mundo».

Dios ha creado al hombre como cima de todo lo creado, para que domine todo lo creado, para que sea Señor de la Tierra.

La creación del hombre no es parte de la naturaleza:

 El hombre no viene de lo creado, de una evolución de lo creado.

El hombre viene de Dios: creado de la nada; hecho a su imagen y semejanza; y puesto en la cima de todo el Universo como Señor, como el que domina todo el Universo.

Pero, toda esta gente piensa el Universo como algo creado por Dios que va evolucionando:

«Él, de algún modo, quiso limitarse a sí mismo al crear un mundo necesitado de desarrollo, donde muchas cosas que nosotros consideramos males, peligros o fuentes de sufrimiento, en realidad son parte de los dolores de parto que nos estimulan a colaborar con el Creador» (LS – n. 80).

Dios no creó un mundo perfecto en su ser, sino que se limitó a sí mismo, produciendo un mundo en evolución, necesitado de desarrollo.

Ellos se meten en la evolución de todo lo creado. Es una herejía. Y, por tanto, tienen que negar el pecado original: esas cosas que se consideran males, no son males, sino que son parte de nosotros, son parte de los dolores de parto. No han comprendido a San Pablo, porque niegan el pecado original. Malinterpretan toda la Escritura, la tergiversan.

Por eso, este hombre tiene que decir:

«Así como los distintos componentes del planeta –físicos, químicos y biológicos– están relacionados entre sí, también las especies vivas conforman una red que nunca terminamos de reconocer y comprender. Buena parte de nuestra información genética se comparte con muchos seres vivos. Por eso, los conocimientos fragmentarios y aislados pueden convertirse en una forma de ignorancia si se resisten a integrarse en una visión más amplia de la realidad» (LS – n. 138).

El reino vegetal, el mundo animal, la criatura humana están relacionadas entre sí. El adn del hombre es una mezcla de otra genética, ya sea animal, ya sea vegetal. Todo es una mezcla de genes: porque todo viene por evolución de lo creado.

Estos hombres quieren interpretar lo que ocurrió en el Paraíso como una evolución de las naturalezas creadas.

Todo surge en una especie, y de esa especie se va evolucionando hasta llegar al hombre. Por eso, todos estamos relacionados unos con otros. El hombre comparte en sus genes cosas de otras especies. Y, por tanto, está llamado a buscar ese amor común, ese amor universal con todas las cosas, ese amor cósmico.

«Cuando se habla de «medio ambiente», se indica particularmente una relación, la que existe entre la naturaleza y la sociedad que la habita. Esto nos impide entender la naturaleza como algo separado de nosotros o como un mero marco de nuestra vida. Estamos incluidos en ella, somos parte de ella y estamos interpenetrados» (LS – n. 139).

La naturaleza no es algo separado del hombre, sino incluido en el hombre. El hombre viene de un animal. Y el animal viene de un vegetal. Y el vegetal viene de la fusión del agua, de la tierra, del aire y del fuego. Hay una interpenetración: una especie penetra a la otra sustancialmente.

Hablar del medio ambiente es hablar de un sistema evolutivo en las especies. Y, por eso, todo está junto, todo están incluido en el otro. Todo está en relación íntima con las demás cosas.

Por eso, dice del Espíritu que está viviendo «íntimamente presente en el corazón del universo».

Ellos caen en este gravísimo error sólo por negar el pecado original. Por lo tanto, tienen que interpretar los males, que vienen de ese pecado, con estas fábulas de la mente: la fábula del medio ambiente, la fábula de la ecología.

Y, por eso, para solucionar los problemas hay que atender a esta interpenetración de las cosas:

«Es fundamental buscar soluciones integrales que consideren las interacciones de los sistemas naturales entre sí y con los sistemas sociales. No hay dos crisis separadas, una ambiental y otra social, sino una sola y compleja crisis socio-ambiental». ( LS – n. 139)

Es el cuento del ecologismo: el problema ambiental es un problema humano, social, de todos. Porque la naturaleza vive en todos. Todos son parte de la naturaleza. Todo está en la naturaleza. Hay que descubrir las potencialidades de la naturaleza para que el hombre encuentre su sito dentro de ella. El hombre no ha sabido poner en su naturaleza humana los otros sistemas naturales, no se ha sabido encontrarse como parte integral de un todo.

El panenteísmo no se refiere al panteísmo, sino a la naturaleza. Se pone el énfasis en lo natural, no en Dios. En la idea panteísta, todo es Dios. Pero en la idea panenteísta, todo es en la naturaleza, la cual es divina porque Dios la ha creado de su ser divino, tiene una marca trinitaria en ella. Ellos van más allá de un panteísmo. En el fondo, son ateos, agnósticos. Ni creen en Dios ni conocen a Dios. Quieren explicar el misterio de la creación con su triste e inútil filosofía de la ecología.

La ecología no es una teología, sino un discurso de la mente humana para engañar con palabras bonitas a los hombres. Es un bulo muy bien presentado para que prevalezca una ideología política que aune a todos en la formación de un gobierno mundial para la total destrucción de toda la humanidad.

El fin de la ecología sólo es esto: destruirlo todo porque, en estas condiciones de vida, no hay solución a nada. Y se inventan un cuento de viejas, escondiendo el verdadero propósito. Es la imposición de una idea común, global, universal.

Como todo está en Dios, todo está en la naturaleza, ¿quién es Jesús?:

«El Hijo… se unió a esta tierra cuando se formó en el seno de María».

Jesús es el que se unió a esta tierra, porque es parte de esta tierra: se anula la Encarnación: el Verbo se hace carne para salvar las almas del pecado. Y se pinta a un Jesús que vive su vida humana y que actúa con todo lo creado como un hombre sentimental:

«El Señor podía invitar a otros a estar atentos a la belleza que hay en el mundo porque él mismo estaba en contacto permanente con la naturaleza y le prestaba una atención llena de cariño y asombro» (LS – n. 97).

La belleza que hay en el mundo. Ya no habla de la belleza del Universo. Jesús vivía en el mundo porque ha incorporado a su persona la naturaleza:

«… todas las criaturas del universo material encuentran su verdadero sentido en el Verbo encarnado, porque el Hijo de Dios ha incorporado en su persona parte del universo material, donde ha introducido un germen de transformación definitiva» (LS – n.236).
Una roca encuentra su sentido en Jesús, no en su ser creado. Su ser creado es imperfecto, está en evolución. Necesita a Jesús para encontrar su verdadero sentido. Esto es el puro panenteísmo.

Jesús ha metido en el universo un germen nuevo, un germen de transformación definitivo. Esto es una gravísima herejía, que viene porque Dios lo creado todo en evolución, en necesidad de desarrollo. Luego, Jesús, que no se encarna en María, sino que se forma en María, como si María necesitara de un hombre para engendrar a Jesús, viene para poner dentro de lo creado lo que su Padre no puso: un germen de transformación que lleve a todo lo creado, que sigue en evolución, hacia la gloria, hacia su elevación. Estos son los delirios de este hombre.

Y, por eso, dice de la Eucaristía:

«En la Eucaristía lo creado encuentra su mayor elevación. La gracia… logra una expresión asombrosa cuando Dios mismo, hecho hombre, llega a hacerse comer por su criatura. El Señor… quiso llegar a nuestra intimidad a través de un pedazo de materia. No desde arriba, sino desde adentro, para que en nuestro propio mundo pudiéramos encontrarlo a él» (LS – n. 236).

Gravísima herejía, que ya viene expresada en su Lumen fidei, pero que aquí la desarrolla. En esa falsa encíclica, la Eucaristía es una transformación, no una transubstanciación.

Dios se mete en el hombre a través de un pedazo de materia, no a través de Él Mismo: como la Eucaristía es una transformación del pan y del vino, Dios se mete en el hombre a través de la sustancia del pan y del vino.
En la Eucaristía no sólo están los accidentes del pan y del vino, sino también sus sustancias.
 Ellos están en la herejía de la evolución. Entonces, Dios tiene que meter en el hombre lo que le falta para su perfección. Y así transforma esa sustancia y pone en ella algo divino, un germen definitivo, porque el hombre tiene que evolucionar hacia lo divino, tiene que elevarse hacia lo divino unido a toda la Creación. Y, por eso, necesita, desde adentro, esa materia transformada, evolucionada, que le relaciona con todo lo creado. ¡Gravísima herejía! ¡Los delirios de la cabeza de este hombre!

Todo el Universo material ha sido elevado en la Eucaristía. En estas fábulas andan metidos toda la Jerarquía. Porque han roto el dogma de la creación de las cosas de la nada. Todo es evolución. Y la eucaristía ayuda a esa evolución, a ese integrar al hombre en la creación. Todo es en Dios. Todo está en el Universo. Todo está relacionado en el mundo creado. No hay diferencias. Hay una mezcla de genes, de especies.

Por eso, este sujeto interpela al diálogo y a buscar en las culturas el motor de este panenteísmo.

«… la Eucaristía… es el centro vital del universo…la Eucaristía es de por sí un acto de amor cósmico…» (LS – n. 236).

Por eso, la Eucaristía tiene que darse a los malcasados, a los homosexuales, a los ateos, a todo el mundo. Porque es el centro vital, el centro de la vida de todo el universo. Hay que llegar al amor cósmico.

«Para los cristianos, creer en un solo Dios que es comunión trinitaria lleva a pensar que toda la realidad contiene en su seno una marca propiamente trinitaria…toda criatura lleva en sí una estructura propiamente trinitaria, tan real que podría ser espontáneamente contemplada…el desafío de tratar de leer la realidad en clave trinitaria» (LS – n. 239).

Todo lo creado contiene una marca trinitaria, una estructura trinitaria: está haciendo referencia a la herejía sabeliana, en la cual la trinidad se entiende como tres funciones diferentes. No son Personas Divinas, sino funcionalidades que forman una estructura.

De esta manera, todo lo creado ya no es vestigio natural de Dios: veo la belleza de una flor y el alma se eleva a contemplar la belleza de Dios. Todo lo creado no es un reflejo natural del creador, sino divino:

«Una Persona de la Trinidad se insertó en el cosmos creado, corriendo su suerte con él hasta la cruz… el misterio de Cristo opera de manera oculta en el conjunto de la realidad natural… De este modo, las criaturas de este mundo ya no se presentan como una realidad meramente natural, porque el Resucitado las envuelve misteriosamente y las orienta a un destino de plenitud. Las mismas flores del campo y las aves…ahora están llenas de su presencia luminosa» (LS – n. 100).

Todo lo creado es un vestigio divino: tiene una marca divina, trinitaria. Es más, tiene una estructura en su ser creado lo más parecido a Dios. Gravísima herejía que contradice la Escritura: sólo el hombre ha sido creado por Dios a imagen y semejanza. Lo demás no tiene esta marca divina. Pero, ellos han anulado el dogma de la creación divina. Por eso, lo tienen que explicar todo con esta basura ideológica. Las mismas flores del campo, las aves, todo está lleno de ese germen definitivo que los catapulta hacia la vida eterna.

Y, por tanto, al ser lo creado algo divino, un modelo divino, todo está en relación y eso lleva a buscar una espiritualidad de lo global:

«….el mundo, creado según el modelo divino, es una trama de relaciones… en el seno del universo podemos encontrar un sinnúmero de constantes relaciones que se entrelazan secretamente… las múltiples conexiones que existen entre las criaturas… nos lleva a descubrir una clave de nuestra propia realización… Todo está conectado, y eso nos invita a madurar una espiritualidad de la solidaridad global que brota del misterio de la Trinidad» (LS – n 240).

La solidaridad global que brota del misterio de la Trinidad: esto es una blasfemia contra el Espíritu Santo.

Dios no ha creado las cosas para una solidaridad, para la gloria de los hombres, sino para darse Gloria a Si Mismo. Se anula la gloria que cada criatura tiene que dar, en su ser creado, a Dios, para buscar un modelo de vida en que el centro de todo sea lo creado. Se busca una armonía en la creación en donde no se dé gloria a Dios.

Si cada criatura, en su especie, necesita para vivir de la otra especie; si cada criatura, en su ser creado, no puede desarrollarse si no se une a las otras criaturas de otras especies, entonces se anula el fin para el cual Dios ha creado a cada especie. Se anula la gloria que cada criatura tiene que dar por sí misma a Dios en su ser creado. Y se va en busca de una armonía entre las criaturas, que es una abominación espectacular. Por eso, el Anticristo está en el fondo de todo este escrito. Hay que presentar al mundo un hombre que sea capaz de reunir todo lo creado en su ser para que así el hombre vea que la ecología es el fin del universo: el culto al universo. Todo va evolucionando hacia el Anticristo.


«Jesús vivía en armonía plena con la creación, y los demás se asombraban…No aparecía como un asceta separado del mundo o enemigo de las cosas agradables de la vida…Estaba lejos de las filosofías que despreciaban el cuerpo, la materia y las cosas de este mundo» (LS – n. 99).

Jesús vivía en armonía, no era un asceta separado del mundo, es decir, no hizo un ayuno de cuarenta días en el desierto, no huía a los montes para orar, para estar apartado de todo. Era un hombre que vivía su vida, que le gustaba todas las cosas agradables, porque no existe el pecado. Todo vale para vivir. El hombre sabe usarlo todo correctamente y nunca se equivoca. Jesús amaba su cuerpo, amaba las cosas de este mundo. Era un hombre para la vida material.

Este es el Jesús que se busca, el nuevo Mesías, el Anticristo, que interpreta el Evangelio según su loca cabeza humana:

«Cuando uno lee en el Evangelio que Jesús habla de los pájaros, y dice que « ninguno de ellos está olvidado ante Dios » (Lc 12,6),

¿será capaz de maltratarlos o de hacerles daño?» (LS – n. 221).

Sentimentalismo puro.

«La naturaleza está llena de palabras de amor, pero ¿cómo podremos escucharlas en medio del ruido constante, de la distracción permanente y ansiosa, o del culto a la apariencia?» (LS – n. 225).

La naturaleza habla, es amor, lleva a un acto de amor cósmico. Hay que escuchar a la naturaleza. Porque todo está rebosando de una fraternidad universal:

«Jesús nos recordó que tenemos a Dios como nuestro Padre común y que eso nos hace hermanos. El amor fraterno sólo puede ser gratuito, nunca puede ser un pago por lo que otro realice ni un anticipo por lo que esperamos que haga. Por eso es posible amar a los enemigos. Esta misma gratuidad nos lleva a amar y aceptar el viento, el sol o las nubes, aunque no se sometan a nuestro control. Por eso podemos hablar de una fraternidad universal» (LS –n. 228).

Un hombre que no ha comprendido lo que es el amor a los enemigos, porque los ve como parte de su naturaleza humana, parte de su vida, parte de lo creado por Dios; los ve como hermanos. Señal de que no sabe discernir entre los hijos de Dios y los hijos de los hombres. No sabe qué es el pecado original. Y no sabe tratar al enemigo como tal. Tiene que darle un cariñito, pero es incapaz de darle la Voluntad de Dios, que es siempre una Justicia para el enemigo. Todos somos hermanos; luego todo es en la fraternidad del universo.

«… cuando el corazón está auténticamente abierto a una comunión universal, nada ni nadie está excluido de esa fraternidad… Todo está relacionado, y todos los seres humanos estamos juntos como hermanos y hermanas en una maravillosa peregrinación, entrelazados por el amor que Dios tiene a cada una de sus criaturas y que nos une también» (LS – n. 92).

Tienes que abrirte a una comunión universal: gobierno mundial, iglesia universal.

Porque todos somos hermanos. Y todos vamos al cielo, incluso los seres inmateriales, los vegetales, los animales, que ya habrán alcanzado la cima de la evolución, estarán en la casa común del cielo:

«La vida eterna será un asombro compartido, donde cada criatura, luminosamente transformada, ocupará su lugar y tendrá algo para aportar a los pobres definitivamente liberados» (LS – n. 243).

Cada criatura luminosamente transformada: todo es en la evolución. Los cuerpos son transformados, no transfigurados, no revestidos de la gloria. Y una roca será transformada en otra cosa para que sea asombro compartido de todos en la casa común del cielo. ¡Cuántos delirios!. Y los pobres ya no serán pobres, habrás sido transformados en otra cosa, liberados de su pobreza.

«… todo lo bueno que hay en ella será asumido en la fiesta celestial» (LS – n. 244).

¿Cómo presenta este hombre sin nombre a la Virgen María?

«María, la madre que cuidó a Jesús, ahora cuida con afecto y dolor materno este mundo herido. Así como lloró con el corazón traspasado la muerte de Jesús, ahora se compadece del sufrimiento de los pobres crucificados y de las criaturas de este mundo arrasadas por el poder humano… En su cuerpo glorificado, junto con Cristo resucitado, parte de la creación alcanzó toda la plenitud de su hermosura» (LS – n.241).

La que llora por este mundo herido; la que comparte los sufrimientos de sus malditos pobres; la que se compadece de los malditos hombres que son esclavizados por los malditos gobernantes del mundo, que no quieren expresar con su ser ese amor cósmico.

Y dice su gran blasfemia: en María, en su cuerpo glorificado, «parte de la creación alcanzó la plenitud de su hermosura». María es parte el universo. La madre gaia. La madre tierra. Ya una parte de la Creación ha sido glorificada. Pero, hay que esperar a morirse para contemplarla.

No pierdan el tiempo con esta basura, con este vómito de Bergoglio. No dice nada nuevo. Repite lo mismo que lleva hablando estos dos años. Sólo que en este vómito se ve más claro su herejía, su cisma y su apostasía de la fe.

A los hombres les encantan estas fabulas. Y se cumple el Evangelio:

«…apartarán los oídos de la verdad para volverlos a las fábulas» (2 Tim 4, 4).

Que nadie los engañe con la fábula del ecologismo. Este hombre niega todos los dogmas y sólo está sentado para destruir la Iglesia. Su vómito ecológico le va a llevar a abandonar esa Silla, porque ha dado un escrito sin inteligencia, que no sigue el método científico y que destruye toda la moral católica. Él se pone por encima de todo eso porque está sólo en su negocio redondo en el Vaticano: ha abierto la Iglesia al mundo, porque hay que buscar la iglesia que quiere el mundo.

«La interdependencia nos obliga a pensar en un solo mundo, en un proyecto común» (LS – n. 164).

Un consenso mundial para resolver un problema que no existe: el CO2 no es contaminante. Pero presentan la búsqueda de otras energías como solución a un problema que no es real.

Todo se quiere sostener en el Universo: que el hombre sea el dios de universo, que lo maneje todo y así no haya pobres.

«…urge la presencia de una verdadera Autoridad política mundial» (LS – n. 175): urge el Anticristo.

Lo único que hay que hacer es quitar el maldito pecado como ofensa a Dios. Si se hace esto, la creación no se rebela contra el hombre y el problema deja de existir.

Pero como se niegan las verdades absolutas, se tiene esta chorrada política del ecologismo.





Comentaristas


Daniel Cortez Alaña.
18 JUNIO, 2015 EN 10:59 AM

¡NO SOMOS “SEDEVACANTISTAS”!: SOMOS CATÓLICOS ROMANOS PERO,¡FUERA DE LA ESTRUCTURA!.
¡Nosotros no somos ni “sedevancantistas” ni “lefevristas”!: estos grupos lo que han hecho es confundir más las cosas más de lo que ya están…¡en estos momentos!; y en estos momentos, quienes defienden a Francisco nos ven como si fuéramos…¡sedevacantistas!.
¡Y han comenzado a perseguirnos y a echarnos de las parroquias y grupos!; ya sea de colegios o lugares que tenemos derecho a asistir como católicos romanos…
Yo, personalmente…¡pienso que es ya hora de no mezclarse más con los católicos romanos unidos a Francisco!; esto lo tengo claro como una opción…
¡Pero Jesús quizo que siguiéramos comulgando de manos de sacerdotes unidos al anticristo!.
¡Y lo que Jesús manda es lo que hacemos!: desde el 15 de marzo de 2013 es la fecha de la abominación…¡pues ya sabía por profecía un año antes que la “abominación” del sacrificio perpetuo comenzaba ese día!; y del 15 de marzo al 20 de marzo estudiamos el Código de Derecho Canónico con un canonista que estudió hasta el doctorado…¡encontrando las pruebas de que su elección había sido inválida!.
¡Ya hemos publicado varias veces el argumento sobre la invalidez de Francisco!: no nos queda la más mínima duda pero es obvio que muchos, por permisión de Dios…¡no se dan cuenta a pesar de ver con sus propios ojos las barbaridades que hacen los masones como Francisco infiltrados en la cúpula elcesial!.
En estos momentos entonces…¡vivimos una especie de batalla bastante frontal entre liberales y conservadores!; y ya los liberales han tomado casi todos los bastiones de la estructura eclesial…
¡Jesús y María nos dijeron que pasaría esto a través de María de la Divina Misericordia!.
¡Creemos firmemente que Benedicto XVI no soportó más gobernar lo ingobernable!; y ahora pienso que tampoco nosotros estamos en posición de sostenernos por mucho más tiempo ante el avance y el ataque desesperado de los “franciscanos de Francisco”:¡ellos creen tener razón con solo decir que “Dios es Misericordia” y son “menosfuñistas”!: se nos fuñen en todos nosotros que llevamos 40 años dando la vida por la Iglesia en la Verdad…¡unos de una manera y otros de otra!; cada uno con sus dones…
¡Se nos fuñen en los Obispos y Cardenales polacos!; en los Obispos africanos, despreciados por Francisco ya mucho hemos visto y tenemos todo archivado y grabado porque después niegan que Francisco dijo esto o aquello…
¡Se nos fuñen en las comunidades que rezaban en latín y no pararon hasta destruirlas por completo haciendo a los 6 meses del pontificado falsario hicieron trizas la Congregación de “Franciscanos de la Inmaculada!: les prohibió expresamente Francisco rezar en latín…¡y esa comunidad quedó destruida!.
¡Hacen una costura de corte y pegue de religiones falsas!; con el slogan de “construyan un mundo de paz, de justicia, de solidaridad”…
¡Francisco les lava el cerebro a los católicos tibios que duermen en la ignorancia!; mientras al verdadero y auténtico Romano Pontífice Benedicto XVI se le ha recluído en una pieza!; en silencio y en oración sin ruido…¡pues es la única manera de salvar su alma en medio de los lobos!.
¡Además!: si Benedicto XVI hablaba enseguida le callaban…¡y a Francisco lo festejan diga lo que diga!; lo alaban en todas las farándulas mundanas…¡rodeado de monjes budistas!(ningún monje budista entra al Cielo, dicho por un monje budista que tuvo la gracia de Dios de ver más allá de la muerte y ningún budista se salva si no reconoce a Cristo como salvador)!; tratando de unirlos a la Iglesia Católica junto con los musulmanes:¡es insólito que sacerdotes y obispos no se den cuenta de la falsedad que se nos está presentando con todo desparpajo!.
¡Que María, Madre de la Luz, nos ilumine a todos!.
¿Por qué estamos ya fuera de la estructura?…¡porque Apocalipsis ya lo dice!: “salgan de ahí”.
¡Porque el Cisma ya está consumado porque desde el 15 de marzo de 2013 ya no tiene validez ningún acto eclesial de Francisco!; esto es el Fin del tiempos…¡y ya no hay mucho tiempo por delante antes de la transformación del mundo entero por medio de la segunda Venida de Cristo!.
Aún Cristo se hace presente en las Misas…¡pero muy pronto no será más presente en los sagrarios y entonces será el tiempo de la Iglesia Remanente!; puesto que se reunirán en las casas y serán perseguidos duramente.


Daniel Cortez Alaña.
19 JUNIO, 2015 EN 10:45 AM

¡El clima actual en Roma hace preever que una vez desaprobadas las apariciones de Medugorjie van por Garabanadal!.
¡En efecto!: el episcopado español ha sido demasiado duro con los hechos sobrenaturales ocurridos hace más de 50 años en San Sebastián de Garabandal…¡y ha prohibido que se hable sin más ni más de las apariciones hechas por la Madre de Dios en esta parte del mundo!; todo por el mero hecho de que “no han sido aprobadas por la Iglesia”(¿?).
¡En lo particular no estoy de acuerdo!: se debe discernir en este tipo de apariciones marianas que se realizan en un mundo secularizado y lleno de materialismo…¡en donde la idea de Dios se ve difusa y todo lo absoluto se a relativizado!.
¡Hago mías las palabras del Presbítero René Laurentin, mariólogo francés y experto en apariciones que asesoró al Bienaventurado Juan Pablo II!:

“Si las apariciones de Lourdes fueran hoy
 no se aprobarían.”

¡Más claro no canta un gallo!.


Padre: josephmaryam
19 JUNIO, 2015 EN 10:51 AM

Pero las han prohibido porque demuestran que Bergoglio no es papa y que el papa verdadero y legítimo es Benedicto XVI. Sólo por eso lo prohiben. Lo demás les importa un bledo. Nunca les ha interesado esa aparición. Ahora les interesa sólo por este motivo. Es la persecución de la misma Jerarquía a los verdaderos católicos que no pueden aceptar a Bergoglio como su papa, el papa de los idiotas.











Mensajes De Dios Al Mundo a Través de su Profeta: María Divina Misericordia

PRONTO MI AMADO PAPA BENEDICTO GUIARÁ A LOS HIJOS DE DIOS DESDE SU LUGAR DE EXILIO.

Viernes 29 de marzo de 2013 a las 08:45 hrs.

Segundo Mensaje para el Viernes Santo

Mi amadísima hija, se hará historia hoy. Así como Mi Pasión está siendo conmemorada, en Verdad, representará la Crucifixión de la Iglesia Católica.

En los días previos a Mi traición en Mi tiempo en la tierra, los sacerdotes de la época lucharon de todas las maneras posibles para tratar de demostrar que Yo era culpable de herejía.


Ellos miraron lo que había enseñado – la Palabra de Dios – y lo distorsionaron. Los rumores que ellos esparcieron contenían mentiras y dijeron que Yo estaba tratando de apartar a la gente de las Verdaderas Enseñanzas de la Iglesia.

 Ellos predicaron en los templos para advertir a la gente que se mantuvieran lejos de Mí, para que no ofendieran a los sumos sacerdotes.

Ellos fueron advertidos que si continuaban difundiendo Mis Mensajes serían desterrados del templo santo, como leprosos.

En algunos casos, a Mis discípulos se les dijo que iban a sufrir castigos físicos y que serían arrestados.

Mientras blasfemaban contra el Espíritu Santo –ellos negaban que Yo hablaba la Verdad y decían que Mi Palabra era de Satanás– ellos continuaban alabando a Dios en los templos.

 Vestidos en vestimentas de reyes, lucharon por su lugar en el altar en el templo.

Todos los humildes siervos fueron hechos estar de pie por horas, mientras ellos se sentaban en sillas, las cuales fueron diseñadas para reyes.

 El altar estaba tan lleno de líderes de la Iglesia que la gente ordinaria estaba confundida.

Ellos estaban obligados a rendir homenaje a Dios al ser forzados a honrar a los siervos de Dios del rango más alto.

Los sumos sacerdotes, demandaban respeto de aquellos que asistían al templo.  Ellos mostraban todos los signos externos del amor y humildad, que se esperaba de ellos, y, sin embargo, se vestían y se comportaban como amos en la Casa de Mi Padre, en lugar de los siervos que estaban destinados a ser.

La gente tenía miedo de ofender a los Fariseos cuando me estaban siguiendo.

Los sacerdotes fueron amedrentados y advertidos que, al menos que pararan de difundir Mi Palabra, serian despojados de sus títulos.

La gente ordinaria sabía que si ellos eran atrapados difundiendo Mis Enseñanzas su propia suerte sería mucho peor.

La Crucifixión de Mi Cuerpo en la tierra completó la primera parte de la Alianza con Mi Padre para salvar a la humanidad.

La Crucifixión de Mi Cuerpo Místico –La Iglesia en la Tierra– comienza hoy, el comienzo de la persecución final, ya que el plan masónico para profanar Mi Casa, ahora estará claro para todos los que conocen la Verdad.

La historia ahora se repite, pero la Verdad no será negada.

Aquellos que me negarán, sin embargo, con el tiempo se volverán a Mí.

Aquellos que conocen que las profecías predichas –en donde Mi Iglesia será el blanco final para desligar del mundo todo rastro de Mi, Jesucristo–  están ahora tomando lugar, me seguirán en Mi ejército Remanente. Ellos seguirán siendo fieles a Mis Enseñanzas hasta el fin del tiempo.

Nadie puede detener la difusión de la Verdadera Palabra de Dios. Nadie.

 El reinado en la Casa de Pedro será corto y pronto Mi amado Papa Benedicto guiará a los hijos de Dios desde su lugar de exilio. Pedro, Mi apóstol, el fundador de Mi Iglesia en la tierra, lo guiará en los últimos días difíciles, mientras Mi Iglesia lucha por su Vida.


Vuestro Jesús



 






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